viernes, 9 de octubre de 2009

El principio


Cuando me preguntan por qué la India me atre tanto, siempre me quedo un poco perpleja.
Es como preguntarle a uno si le gusta Europa. ¿Pero qué Europa? ¿Los bosques boreales de Laponia o las playas de las Islas baleares? en la India ocurre lo mismo: ¿Qué india?
¿La India que lucha contra la pobreza o la del gigante económico que disfruta de uno de los mayores índices de crecimiento económico del mundo? Porque la India es todo eso, y mucho más.
La India, como Europa, no es un país.
Poblada por 1.200 millones de habitantes que hablan más de ochocientos idiomas, de los cuales pocos son considerados oficiales.
Veneran a millones de dioses.
Pero no todos los indios son iguales,ni veneran a los mismos dioses e incluso no comen los mismos platos pero todos comparten el orgullo de ser indios.
El contraste es a veces surrealista: es el contraste entre la inercia de una antigua civilazión y la explosiva vitalidad de una nación joven.
Quizás los occidentales tengamos algo que aprender del país que Ghandi alumbró....